Perfil del cuidador informal del adulto mayor en Puerto Rico

diciembre 08, 2019

Ayer 6 de diciembre de 2019, seis socias y tres socios de la Cooperativa Juvenil Escolar Manuel Fernández Juncos, conversaron con el Dr. Ángel M. Muñoz, Marlene Cabán y Lindamar Fenández, sobre: el estudio del perfil del cuidador informal del adulto mayor, los cuidados y atenciones de los adultos mayores en su núcleo familiar y la preparación para disfrutar de una vejez digna para el 2080.

Hubo una demostración de lo difícil que resulta para un adulto mayor con problemas de visión y artritis, abrir un envase con medicamentos, cuando la artritis ya ha inflamado las articulaciones, provocando dolor y rigidez. Para agravar su situación la persona a cargo, ya está presentando problemas severos de ansiedad, frustración y poca empatía por las tareas asociadas a su cuidado. La escena causó risa, hasta que el Dr. Muñoz indicó que nadie vino en su ayuda a recoger los medicamentos del suelo, cuando lo teníamos tan cerca para darle una mano.

Tanto Ángel como Marlene son parte del equipo de trabajo, responsables de la publicación en noviembre de 2019, del estudio del perfil del cuidador informal del adulto mayor en Puerto Rico. La iniciativa está apoyada por la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico y es parte de los trabajos de la Escuela para Cuidadores Informales de Adultos Mayores. (1)

Esta experiencia es parte de las actividades conocidas como La Buena Pauta, llevada a cabo por un grupo de socias y socios de la Cooperativa Juvenil Escolar Manuel Fernández Juncos, durante el presente año escolar. La actividad del 6 de diciembre, fue dividida en cuatro partes. La primera socias y socios muestran a los invitados la forma en se obtiene la composta y elabora el alcoholado mejorado, la segunda les enseñan a ofrecer mantenimiento a una compostera, al mencionarles el balance entre el carbono y los desperdicios vegetativos. Luego comparten juntos la merienda y al final hay un conversatorio sobre los temas del día.

Antes de iniciar es importante saludar a los invitados dándole la mano, mirándolos a sus ojos e indicarles que son bienvenidos a la cooperativa juvenil.

Hay un mensaje de bienvenida por parte de los socios.

Los invitados participan con los dos grupos, los cuales les enseñan sus experiencias en el huerto.

Si alguno de los invitados, desea establecer una compostera en su hogar, se les enseña la distribución de carbono, nitrógeno y humedad.

Al conversatorio, donde dialogaron sobre una diversidad de temas: el perfil del cuidador como uno de mujer, en su mayoría sin pareja, viviendo con menos de $10,000 al año, con poca ayuda de la familia, presentando un cuadro relacionado a una depresión leve y una edad promedio de 51 años. (2)

A la 1:00 p.m. de ese mismo día, junto a seis de los participantes visitamos el Hogar de cuido prolongado Casa de Amor, administrado por el Sr. Carlos Santiago. Allí se habló sobre la migración de la población joven del país, lo cual limita el cuidado familiar de los adultos mayores. También los costos relacionados al cuido de los adultos mayores en los hogares. Conocimos a Tata hija de Doña Carmen Ilia González y a las profesoras Luisa Cedeño y Mirna Rivera, estas últimas fueron migrantes en los Estados Unidos, donde estudiaron y trabajaron. Lo cual reafirma mi posición, sobre la necesidad de preparar a las socias y socios, para una futura vida alejados de Puerto Rico, debido a la debacle económica y política, junto a la falta de empleos con salarios dignos. Una de las cuidadoras del hogar Fabiola Rivera, compartió su experiencia como estudiante de enfermería y posible migrante.